Valvoline EGR Cleaner es un rociador de limpieza eficaz que se utiliza para disolver depósitos en la válvula de recirculación de gases de escape (EGR), el sistema de admisión de aire y las válvulas de entrada. Ayuda a maximizar la eficiencia del motor, lo que permite un óptimo funcionamiento sin problemas. Es muy beneficioso para restaurar el flujo de aire al motor, mejorar la potencia y la aceleración, así como para reducir el humo del escape. Valvoline EGR Cleaner está diseñado solo para uso profesional y es un complemento perfecto para cualquier taller.

Valvoline EGR Cleaner - 887071 Limpiador EGR

Name: Valvoline EGR Cleaner - 887071 Limpiador EGR
SKU: 1001006

SKU: 1001006

14,03 €

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Valvoline EGR Cleaner se puede aplicar a válvulas EGR, sistemas de admisión de aire, colectores o válvulas de entrada. El producto ayuda a mantener niveles manejables de depósitos de carbón, optimizar el rendimiento del sistema y prolongar su vida útil.
Los depósitos de carbón se acumulan inevitablemente en la válvula EGR, lo que reduce los kilómetros por litro y provoca emisiones excesivas. Si no se limpia con regularidad, los depósitos que se acumulan en la válvula impiden que se abra y se cierre correctamente. Valvoline EGR Cleaner se utiliza para mantener los niveles de acumulación de carbón en el sistema, conservando solo la cantidad manejable que el motor puede consumir. Nuestro rociador en aerosol es una forma simple y eficiente de limpiar la válvula EGR y los componentes periféricos. Es uno de nuestros productos más vendidos, ampliamente elogiado dado que:

actúa rápido,

no deja residuos,

previene los depósitos de resina y

es fácil de usar.
En primer lugar, desmonte la manguera de admisión de aire o el sensor de presión turbo. Luego, arranque el motor y déjelo funcionar a 2000 RPM.

Agite la botella antes de abrirla y colóquele la boquilla encima. Inserte la boquilla en el colector de admisión de aire y rocíe el aerosol en intervalos de 5 segundos. Repita el proceso hasta que el motor vuelva a funcionar sin problemas.

Una vez que esté seguro de que el motor esté funcionando correctamente, apáguelo y vuelva a conectar la manguera de entrada de aire o el sensor de presión turbo. Realice un recorrido de prueba de 10 minutos.